UN DIA MALO, LO TIENE CUALQUIERA

Esta entrada no trata de un estado de depresión. Con ella tan solo quiero mostrar el mal día de una persona normal. Vivo en un pueblo del que solo salgo para ir al médico. La salud que jamás tuve se va deteriorando, lo noto. Mi trabajo no me llena (que no es que no me guste, todo lo contrario) pero querría, y sé que puedo, aportar mucho mas. Me siento infravalorado en todos los aspectos: en el laboral y en lo económico. Me encantaría formarme, pero no me dejan. Intento aportar ideas y soluciones, pero nada se lleva a cabo. Ya en mi vida privada todos conoceis mi situación, pero que se le va a hacer. Mi trabajo, aunque la gente lo dude es muy duro. Y jamás termina en el telecentro; allá donde voy me asaltan con consultas y solicitud de consejo. Y tampoco me quejo, tengo trabajo. Pero demasiados frentes. Para resumir, Ni salud, ni dinero ni amor.